sábado, 31 de mayo de 2014

La bruja de Agnesi (y II)


(Continuación) Y a pesar de ser conocida esta circunstancia, las posteriores traducciones y ediciones han mantenido, de forma incomprensible, el término.

Una desafortunada actitud, que no se sabe a ciencia cierta si es debida a una expresa y torticera intención (algunos autores la traducen como “la curva de la hechicera”), o al deseo de hacer el típico y fácil juego de palabras, de escasa y dudosa gracia.

Por suerte, en otros idiomas se habla de ‘loci’ (en latín, lugares geométricos, curvas) de Agnesi. Mucho más adecuado. Pero menos frecuente que la inglesa expresión.


Una distorsionada reputación
Lo injusto de la susodicha expresión procede del hecho de que, es a través de ella, por la que la matemática ha quedado inmortalizada en los libros. Como si no contaran para nada sus otros grandes méritos matemáticos.

Una circunstancia que no le hace justicia en absoluto, ya que devalúa el trabajo científico y distorsiona la reputación histórica de una gran mujer. No hay más que mirar su bagaje.

Está considerada en Europa como una de las más capaces científicas del siglo XVIII. Es la autora de la obra matemática, hecha por una mujer, más antigua que se conserva.

Y fue una gran impulsora de uno de los principios de la Ilustración: divulgar y propagar el conocimiento en todos los ámbitos y para todas las personas. Algo que María hizo con creces.

Pero es que está de plena actualidad física ya que la dichosa curva, doscientos años después de que Fermat la estudiara, representa una aproximación matemática de la distribución de la energía espectral de los rayos X y visibles.

También lo es de la potencia disipada en los circuitos de alta frecuencia en resonancia. Así que Física y Matemáticas de la mano.

Y es uno de los personajes más citados, en los estudios realizados sobre el papel histórico de la mujer en las matemáticas.

Pues bien, sólo se la recuerda por la curva, con el mote de “bruja” y tiene, como único reconocimiento, un cráter en el planeta Venus que lleva su nombre en su honor.

Bueno, desde hace unos días tiene también su doodle.

Muy pocas alforjas para el tan abultado bagaje de esta Dama de la Ciencia.




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