domingo, 22 de marzo de 2015

The Ides of March, la canción


Y dos. Forma parte de Killers (1981), el segundo álbum de estudio de la banda británica de heavy metal Iron Maiden constituida en la Navidad de 1975; cuarenta (40) años hará estas próximas. Ya me dirán qué piensan de la portada.

Como sabe, la canción es una composición instrumental, así que poco que contar de la ciencia contenida en su letra. Y del título de la misma, The Ides of March, ya hemos comentado algo en otra ocasión, de modo que lo dejamos aquí.

De lo que sí les puedo contar algo es del origen de tan extraño nombre para una banda musical, Iron Maiden o “Doncella de hierro”. No me negarán que suena raro.

Ya de la que va, y como en otra ocasión le he referido este metal, el hierro (Fe), junto con el cobre (Cu), el estaño (Sn), el mercurio (Hg), el plomo (Pb), el oro (Au) y la plata (Ag), son los siete (7) metales conocidos desde la antigüedad por el hombre. Una referencia química.

Iron Maiden, grupo musical
Al parecer se lo puso Steve Harris, el bajista, quien cuenta que, por aquellas fechas del último tercio del siglo XX, vio una adaptación cinematográfica de El Hombre de la Máscara de Hierro, de la conocida novela homónima del escritor francés Alexandre Dumas (1802-1870).

Una novela que al igual que ocurrió con otras, dicho sea de paso, el prolífico autor no escribió.

Resulta que tenía tanto éxito todo aquello que aparecía publicado con su nombre, que numerosas novelas escritas por otros autores fueron editadas como si las hubiera escrito él. La razón ya se la puede imaginar era puramente comercial y crematística.

Fue lo que ocurrió con la imperecedera El hombre de la máscara de hierro, escrita en realidad por Emile Ladoucette, y cuya versión Dumas se encuentra, a manera de ensayo, en su libro Crímenes célebres.

Bien, aunque un poco ajustado -vamos como quien dice está traído por los pelos-, puede que de aquí sacara Steve lo “de hierro”. De acuerdo, pero, ¿y lo de “doncella”?

Bueno, esto tiene también unas tragaderas. Cuenta el bajista que la imagen de la cara cubierta con la máscara de hierro, y la propia frase del título, le conectó de alguna forma con ese dispositivo de tortura conocido como Iron Maiden, “Doncella de hierro”.

Iron Maiden, instrumento de tortura
Fue un dispositivo, supuestamente, utilizado para la tortura y ejecución por vía judicial, durante buena parte de la Edad Media. Consistía en una especie de caja capaz de contener a un ser humano, con tapa que se abatía con bisagras y cuya cara interior estaba cubierta de pinchos.

Imagínese la situación al cerrar la tapa.

Y aunque hay quienes piensan que la primera “doncella de hierro” fue construida en Núremberg (Alemania), y que la primera persona ejecutada por este medio fue un falsificador de monedas, allá por el 1515, lo cierto es que hay pocas pruebas de ello.

De lo que sí hay constancia fidedigna es que este artilugio de Núremberg fue construido mucho después, ya en el siglo XIX, y como fruto, además, de una mala interpretación de otro instrumento de tortura, la "capa de la infamia".

Un mecanismo hecho de madera y latón pero sin pinchos, que no dañaba el cuerpo y que era utilizado para castigar públicamente a delincuentes como cazadores furtivos y prostitutas, que tenían que llevarlo en público durante cierto tiempo.

Un artefacto que por cierto empieza a aparecer también en la literatura romántica, y es a partir de ahí es cuando se populariza con fines lóbregos, luctuosos y macabros.

Para que se haga una idea, el novelista y escritor irlandés Bram Stoker (1847-1912) escribió una historia corta sobre la doncella de hierro llamada así, The Iron Maiden (1893).

Sí, es el famoso Stoker, que alcanzó reconocimiento literario mundial por su novela Drácula (1897). No en vano es el vampiro más famoso de los que en este mundo han sido, son y, es probable, serán.

Y a lo que me traía. La banda de heavy metal Iron Maiden sacó su nombre de este dispositivo. O eso cuentan, que vaya usted a saber. Así que, aceptamos pulpo como animal de compañía.

Mejor les dejo con la canción.




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