viernes, 6 de noviembre de 2015

‘Bones’, Brennan y Reichs (3)

(Continuación) Porque han de saber que el personaje Temperance Brennan, no fue una creación expresa de unos guionistas para la televisión, en ese 2005 que se inicia la serie, sino la adaptación de uno literario ya existente.

Brennan, la ficción literaria
Y del que es autora la antropóloga forense Kathleen "Kathy" Reichs (1948), profesora en la Universidad de North Carolina y colaboradora del Laboratorio de Ciencias Jurídicas y de Medicina Legal de Québec.

Porque Reichs, además de sus libros técnicos sobre antropología y medicina forense, tiene otra vertiente literaria, y desde hace años escribe novelas de misterio basadas en sus experiencias.

La primera, Déjà Dead, es de 1997. Desde entonces hasta la fecha, le han publicado nueve (9) más, que han sido traducidas a treinta (30) idiomas.

Así que bien por la afición. O mejor que bien.

En la actualidad la afición le ha podido de largo a la profesión y es su personaje de novela, la antropóloga forense Temperance Brennan, la que investiga en la ficción, siendo algunos de sus casos el origen de la exitosa serie televisiva 'Bones'.

Una vez más estamos ante una historia que pasa del papel a la tele.

Pero en cualquiera de los medios, la ficticia doctora T. Brennan está basada en la verdadera doctora Kathy Reichs, así como su ficticio Instituto Jeffersonian donde trabaja, está inspirado en el real Instituto Smithsoniano.

Un paralelismo con el que Reichs, al menos en lo personal y profesional, procura marcar distancias.

Si bien es cierto que existen similitudes entre escritora y personaje, y los casos de las novelas están basados en casos reales investigados, no lo es menos, según ella, que existen diferencias entre su personalidad y la del personaje.

Divergencia que dejaremos aquí por ahora y nos quedaremos conque T. Brennan es el alter ego de K. Reichs.

Reichs, la realidad científica
Está encarnada por Kathy Reichs quien como antropóloga, durante treinta (30) años ha mantenido un contacto estrecho con fémures, calaveras y otros restos humanos. Un trato óseo que en muchos casos le ha permitido poner nombre y apellidos a un cadáver o descubrir al culpable de un asesinato.

Ella participó en los trabajos forenses que se hicieron en la Zona Cero de Nueva York, después de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001.

Una experiencia dura y que ella recuerda como una de las más terribles que le ha tocado vivir a lo largo de su carrera profesional.

Una profesión en la que, curiosamente, no existen tantos antropólogos forenses como la ficción televisiva pudiera dar a entender. La certificación de la American Board of Forensic Anthropology (ABFA) no alcanza al centenar de personas.

Una magnífica y loable labor sin duda, vuelvo con Reichs, que en los últimos tiempos ha compatibilizado con la afición de escribir, como también hace su personaje Brennan.

Y ojo al dato. Las dos son mujeres, las dos antropólogas forenses, las dos escritoras de éxito y las dos con un personaje de ficción que es también mujer, antropóloga forense y escritora de novela de misterio. (Continuará)




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